- Más de 70 entrevistados participaron en la encuesta que busca conocer su percepción sobre la situación económica de las empresas, las expectativas a futuro y la evolución de la región.
Concepción, 28 de agosto, 2013.- La crisis productiva producida por la pérdida del modelo industrial, el déficit en infraestructura y la centralización de las empresas, son los principales problemas de la VIII Región a juicio de los ejecutivos y empresarios del Biobío. Así lo reveló el primer Estudio de Percepción Empresarial realizado por Irade.
Para la realización de la encuesta se entrevistaron a alrededor de 70 altos ejecutivos y empresarios de las principales empresas e instituciones de la Región del Biobío. “La finalidad del estudio fue conocer su percepción sobre la situación en que se encuentran sus empresas e instituciones, las expectativas a futuro, las preocupaciones y los factores que dificultan la actividad empresarial y principalmente la evolución de la región, en términos de desarrollo económico y emprendimiento”, explicó Gustavo Alcázar, presidente del Directorio de Irade.
A la pregunta, ¿cómo cree usted que evolucionará la actividad económica de la región en los próximos seis meses?, solo un 13,6% de los encuestados tiene una visión positiva, mientras que un poco más del 50% cree no variará y un 33% ve el futuro en forma pesimista.
Para el 45,5% la situación general de su empresa no cambiará, como tampoco el empleo (53%). Sin embargo, la mayoría califica como buena la actual situación de su empresa (71%) con un nivel de demanda normal (54%) o alto (38%).
Ante la pregunta sobre cuáles son los factores que dificultarán la actividad de la empresa o marcha de los negocios, la mayoría menciona la disminución de la demanda (75,8%), el aumento del costo de la energía (76%), la mayor competencia producto de los efectos de una economía globalizada (67,7%). También expresaron su preocupación por las movilizaciones sociales (71%) y la incertidumbre política (72,3%).
Sectores con mayor dinamismo
El sector energético es, a juicio de los entrevistados, el que tiene mayores perspectivas de crecimiento, con un 48,5% que opina que irá en ascenso. El sector servicios crecerá (47,7%) o mantendrá (49,2%), mientras que un 56,9% juzga que el desarrollo del turismo se mantendrá (56,9%), comparado con el 41,6% que indica que crecerá. Las áreas de agroindustria, transporte y forestal se mantendrán en su evolución, mientras que para un 40,9% la construcción irá en descenso, al igual que la pesquería (65,6%).
Al evaluar su propio rol, los ejecutivos y empresarios del Biobío concordaron con la premisa de que las decisiones organizacionales tomadas por ellos generan mayores beneficios para las empresas (87,7%). Consideran que la relación público-privada es insuficiente para impulsar el desarrollo regional (73,8%) y reconocen que las empresas deberían aportar más en la solución de los problemas regionales (78,8%).
Cuando se les consultó sobre el desarrollo de la región, el 62% de los encuestados afirmó que la infraestructura es un problema prioritario para el desarrollo de la empresa, mientras que un 87,9% está muy de acuerdo en que es necesario aumentar los incentivos para atraer más inversión en la Región del Biobío. El 72,3% considera que en la región las empresas no cuentan con incentivos para el desarrollo del emprendimiento y el 66,7% que el factor energético se está transformando en un problema para el desarrollo de las empresas.
El estudio también preguntó por el impacto de factores coyunturales como el malestar social y cuestionamiento al modelo económico. El 77% de los encuestados estima que los niveles de desigualdad social en la región son un problema para el desarrollo de las empresas, mientras que el 84,8% considera que el aumento de los impuestos no resuelve los problemas sociales. Para el 78% sí se deben realizar cambios al sistema de pensiones. La relación empresa / universidad es puesta bajo lupa por un 78,8%, que opina que hay escasa sinergia entre ambas entidades para impulsar el desarrollo regional.
La carencia de liderazgo también fue uno de los puntos relevantes. Un 81,9% está muy de acuerdo que la Región del Biobío se ha ido quedando atrás en relación al resto del país, faltan liderazgos políticos que contribuyan su desarrollo (95,4%), así como liderazgos empresariales influyentes (66,6%).
Cuáles son los problemas de la región
El estudio también incluyó preguntas abiertas para que los entrevistados comentaran libremente sobre los principales problemas de la Región del Biobío. Casi la mitad de los entrevistados nombraron a la crisis productiva en primer lugar, seguido por el déficit en infraestructura y la centralización. “Hemos pasado de una región industrial a una reducida a exportadora de materias primas con poco valor agregado con dependencia de los commodities”, afirmó Gustavo Alcázar, quien agregó que la crisis de Huachipato fue referencia permanente, como empresa simbólica del desarrollo de la región y del país. “No solo está en juego el empleo de sus funcionarios, sino el empleo concatenado de las empresas que dependen de ella. Con la crisis del acero se está muriendo la industrialización como la conocíamos, y se hacen más relevantes los urgentes esfuerzos para innovar en nuevas formas de desarrollo”, agregó el ejecutivo.
Al describir las principales características de las empresas de la región, se menciona a la centralización en primer lugar. “Aquí nos referimos a la centralización en el ámbito del mundo privado, donde es dramático ver como con el tiempo las casas matrices de empresas que nacieron en la zona han ido emigrando a Santiago, ya que ahí es donde les conviene estar. Por este motivo los gobiernos corporativos y la gestión profunda no está en la zona, aquí no se toman las decisiones estratégicas a nivel privado ni público. En este sentido, se observa una desafección de los empresarios con las grandes inversiones regionales ya que acá sólo están las plantas”, explicó el presidente del Directorio de Irade.
Dentro de las medidas que debiera tomar el gobierno central para impulsar el desarrollo regional se mencionaron la descentralización, mejor infraestructura y desarrollo energético.
Empresa y empresario más destacado
En el estudio se les pidió a los empresarios y ejecutivos que nombraran la que en su opinión era la empresa más destacada de la región. Destaca en primer lugar CAP Acero, seguida por Arauco, CMPC y Essbio. Los entrevistados también escogieron al empresario o ejecutivo más destacado de la región. En primer lugar salió mencionado Andrés Arriagada, fundador y presidente del grupo de empresas Aitue, acompañado por Iván Flores, ex gerente general CAP Acero y Jorge Serón, gerente de Operaciones Forestales de Arauco.
METODOLOGIA
El diseño de encuesta fue realizado a través de procedimientos PAPI (Paper and Pencil Interview) o Entrevistas Asistida con Cuestionario en Papel a Gerentes y/o Ejecutivos. La naturaleza del estudio es descriptiva. El marco muestral (población de estudio) conformado por 107 empresas vinculadas a IRADE, el tamaño de la muestra fue de 55 empresas, al considerar un 15% de proporción esperada de no respuesta quedó el tamaño en 66 entrevistas, con un nivel de confianza del 95%. El trabajo de campo fue realizado durante el 19 de julio al 14 de agosto.
El cuestionario se estructuró a partir de las siguientes dimensiones: situación actual, expectativas y opiniones respecto de los principales problemas de las empresas y la región.
Los análisis de datos estos fueron realizados en función de los objetivos y naturaleza de las preguntas realizadas. Las técnicas utilizadas fueron análisis de frecuencia y balance de respuestas.
SOBRE IRADE
Irade, una corporación de derecho privado sin fines de lucro, agrupa a las principales empresas productivas y de servicios de la Región del Bío Bío. Sus áreas de acción se concentran en el área del Management, buscando satisfacer las necesidades de educación continua de las empresas para fortalecer las habilidades de sus ejecutivos y trabajadores; en Capital Social, impulsando el desarrollo regional, incrementando la articulación entre el sector privado, y entre el sector privado y el sector público; y en Proyectos de Desarrollo Local, donde ejecuta una cooperación técnica del BID/Fomin, con el propósito de fortalecer la competitividad de las Pymes.
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